Relato de pesca en mar - Tercera parte

La cosa se iba animando conforme el tiempo se iba estabilizando.
La temperatura del agua iba en aumento, lo que provocó que el espárido entrara a las playas a comer aumentando su actividad y acercandose mas a la costa.
Los peces picaban bastante bien y no muy lejos, pero ninguna captura superaba el medio kilo.

No puedo quejarme ya que a muchos les gustaría coger unas cuantas doradas de ración pero los que nos ponemos a la dorada y echamos muchas horas, días y noches exclusivamente tras esa especie buscamos tener la suerte de poder luchar con una dorada entrada en kilos.

Es el pez más perseguido por el pescador deportivo desde orilla y es que su pesca, su picada y la lucha de una señora pepona es imposible de olvidar.
El surfcasting tras la dorada es totalmente adictivo!
Y si es por la noche mas adictivo aún, os lo aseguro.

Aqui os muestro las primeras doradas de mi padre que no perdia de vista el puntero de su caña.



Despues del pez volador, lisas y algun que otro sargo porfin se estrenó con las doradas.
Los dias siguientes tambien consiguio sacar unas cuantas más, aunque decidimos soltarlas.

Le he regalado 2 carretitos bastante apañaos y mis 2 cañas antiguas de surfcasting para que fuera tomando contacto con el equipo.
Este verano espero que saque una bien gorda y yo otra!
Y que pueda enseñaroslo por aquí

El relato aun no ha finalizado
Continuara..

No hay comentarios:

Publicar un comentario